// 04.06.2015 - 25.07.2015 / Sala SEMPERE

DEL ESPACIO HILADO

Mónica Jover


Con estas nuevas propuestas creativas Mónica Jover inicia una sugerente evolución estética. A diferencia de otros creadores, ella no necesita generar grandes rupturas u oposiciones para que la evolución se produzca. Sus evoluciones creativas se caracterizan, como casi todo en su poética plástica, por la sutilidad.

La evolución brota de la introducción de un nuevo elemento: el hilo. Mónica se enreda creativamente con él para generar su metamorfosis evolutiva. Va introduciendo progresivamente en sus obras, con calma y serenidad, el nuevo material buscando no una ruptura contundente sino una evolución serena de su poética.

Y, como en toda evolución o cambio voluntario, se han producido dudas e incertidumbres, en este caso estéticas, que se observan en sus primeras experimentaciones con el hilo. El hilo genera, en un primer momento, pespuntes cortos, titubeantes y apretados sobre la superficie pictórica desde un papel subordinado a la pintura aún dominante.

La confirmación de las posibilidades expresivas del hilo y su adecuación o armonía con el universo poético de la autora es el siguiente paso. Mónica constata, mediante la experiencia plástica, que el nuevo material encaja, aporta y enriquece su poética basada en la armonía de los opuestos: mímesis y abstracción, objetividad y subjetividad, emoción y razón, mancha cromática difusa y dibujo lineal preciso, planitud y tridimensionalidad, curva emocional y geometría racional, vacío y plenitud. Una simbiosis que se produce cuando el hilo se metamorfosea en línea, integrándose así en su poética armónica de los opuestos y equilibrándose con la pintura.

A partir de esta simbiosis, el hilo obtiene un creciente protagonismo introduciendo valores tridimensionales y de textura nuevos; metamorfoseándose en veladuras para dejar entrever la base pictórica; convirtiéndose en líneas paralelas configuradoras de planos geométricos tupidos, constructivos y de sutil cromatismo o emergiendo del lienzo para proyectarse en el espacio exterior y atar al espectador con la poética plástica de la que nace.

La experimentación con las diferentes posibilidades plásticas que el hilo puede generar atrapa a la autora que goza y se recrea en el proceso evolutivo por el que éste la lleva. Mónica ha tirado del hilo y ello le ha generado una fecundidad plástica que acaba de empezar a tejerse poética y plásticamente en sus obras.

Joel García Pérez

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