El mundo está formado por conexiones físicas, tecnologías, relacionales, emocionales... Son las que construyen nuestros vínculos, nos unen, nos permiten estar más cerca, compartir conocimiento, experiencias, sentimientos,...
En 1929 el escritor húngaro F. Karinthy en un cuento titulado Chains enunció una teoría según la cual todos los seres humanos estamos conectados a través de una serie de pasos. Es el principio de los seis grados de separación. Algunos ensayos y pruebas posteriores realizados por grupos de investigación intentaron demostrarlo incluso la propia red social Facebook está basada en ese principio.
Esto puede ser cierto para las personas, pero ¿ocurre lo mismo con los objetos, los espacios o los materiales? Un bosque de Galicia puede estar conectado con el usuario de una cafetería de Londres y, a su vez, una línea industrial de Portugal puede estar relacionada con la creación de algún arquitecto de renombre en Alicante.
Los materiales son los que construyen los espacios que habitamos. A través de ellos, de las manos o los procesos que los transforman, de las mentes que los piensan y que los combinan estamos vinculados .
Esta es nuestra propuesta: Conocer el origen de los materiales: de dónde proceden, cómo se transforman, cómo llegan hasta nosotros y quién intervino en todos estos procesos. Un recorrido virtual expositivo que traza la cadena de valor de la madera a través de los diferentes oficios que intervienen en él, para descubrir cómo estamos unidos como usuarios con este material que forma parte de nuestros espacios de vida.