La muestra presenta un recorrido cronológico por la obra de artistas japoneses como Akira Matsumoto, Hideo Honda, Fumiko Shinkai o Susumu Endo, entre otros, que han trabajado en el grabado desde los años setenta a los noventa.
A finales del siglo pasado Japón empieza a aproximarse a Occidente mediante las vías comerciales. El arte japonés, notablemente influido por la cultura china, había centrado su técnica en las estampas o grabados, en los que se combinaba la temática tradicional con una técnica preciosista. Las estampas japonesas comenzaron a exportarse a Europa y América, pero no adquirirían fama hasta que los impresionistas empezaron a interesarse por ellas, debido a su frescura, sencillez y gran fuerza expresiva.
Para la Directora del Museu d’Art Contemporani d’Eivissa, Elena Ruiz Sastre, “este deseo de contacto con Occidente es lo que explica la presencia de artistas japoneses, entrado ya bien el siglo, en la Bienal de Ibiza, sobre todo a partir de la especialización de la Bienal en 1972, cuando se decanta por la obra gráfica denominándose Ibizagrafic y se constituye en una de las Bienales de grabado más importantes de Europa”.
La colección de estampas japonesas de este museo se inicia a partir de 1972. La variedad técnica de las estampas refleja la calidad de las escuelas y talleres japoneses que actualmente están efectuando grabado. La riqueza del papel empleado, las diferentes texturas y facturas hablan de un especial gusto por el detalle y por la obra entendida como un conjunto de factores que se traducen en un lenguaje de ricos matices.