La Universidad de Alicante se complace en exhibir la arquitectura de Alberto Campo Baeza a través de sus dibujos de ideación en esta exposición celebrada en el marco del XVII Congreso Internacional EGA.
Para la generación de arquitectos a la que pertenece el arquitecto, el dibujo ha sido y es un instrumento insustituible para pensar la arquitectura. Para ellos no es concebible proyectar sin dibujar, sin trazar unos sencillos dibujos a veces casi de carácter diagramático que, sin embargo, están preñados del germen del proyecto. Existe un mecanismo íntimo vinculado a la capacidad de imaginar a través del dibujo o, más bien, de la acción misma del dibujar. Un mecanismo que nace de la relación de formatividad o constructividad de este tipo de producción gráfica. Algo que comparten el arquitecto con el pintor y el escultor quienes, a menudo, también bosquejan sus balbucientes formas mientras reflexionan y van dando forma a su incipiente obra al inicio del proceso creativo. Esta íntima relación entre el dibujo y las tre arti del disegno era ya apuntada por Vasari en su célebre texto. No es casual que sea a partir del Renacimiento, cuando arquitectos y pintores logren desarrollar con precisión los sistemas de representación –no sólo la perspectiva cónica, también las proyecciones paralelas-, el momento en el que el dibujo –y con él el proyecto- reemplace la práctica de los maestros constructores basada en métodos de repetición de modelos tipológicos fruto de su experiencia constructiva.
La exposición pretende mostrar cuál es el pensamiento gráfico de Alberto Campo Baeza, poniendo en valor el papel del dibujo en el proceso íntimo de ideación de la arquitectura. Simultáneamente, trata de relacionar dicho proceso creativo con una taxonomía conceptual transversal a su producción independientemente de la cronología o de la tipología edificatoria. Esta organización vertebra la estructura de la exposición a modo de disección de su obra a partir de las estrategias proyectuales más recurrentes. De ésas, sus ‘ideas construidas’, que no son sino temas con variaciones sobre tipos y arquetipos de la arquitectura, la disciplina más antigua de la humanidad civilizada que, en su milenaria historia, no puede dejar de volver la vista atrás para conocerse, reconocerse y redefinirse en su continuo devenir.