En esta versión de la feminidad hemos
querido plasmar algunos momentos de
la efímera belleza de un vientre en gestación.aa
Mujeres, madres, siempre y desde siempre. No hay
época, ni moral, ni raza, ni culto ni religión que las haga
diferentes, siendo el desnudo lo que más las hermana,
haciendo desaparecer las diferencias exteriores. Delicado
momento en el que el vientre se va agrandando como anuncio
de una vida. Cuerpos desnudos, espléndidos lienzos para jugar
con los colores y acariciar con los pinceles la palpitante esperanza
que late bajo esa piel. Piel dilatada, ensanchada, estirada, que respira
por los poros un ansia de futuro. Como heroínas, convertidas por un
instante en estáticas imágenes, parecen a veces cargadas de una
inmensa fragilidad y por el contrario también denotan la inconmensurable
fuerza de las diosas con su inmenso poder de creadoras. Hechizados
por el enigma de las entrañas de las hembras, hemos querido
rendir un homenaje a todas las madres del mundo. a
Carmen Arbués Miró & François Poirier