El Vicerrectorado de Cultura, Deporte y Extensión Universitaria y el Servicio de Cultura de la UA son los impulsores de InteractUA, una plataforma dirigida a estudiantes de la Universidad de Alicante con inquietudes e intereses en diferentes disciplinas artísticas, un espacio para impulsar y desarrollar la formación artística y cultural del alumnado de nuestra universidad.
A través de la II Convocatoria de Artes Visuales se ha invitado al alumnado miembro de la Plataforma InteractUA a presentar creaciones artísticas en torno a la temática Migraciones. Migración alude a movimiento, a desplazamiento, tanto de personas, como de animales e incluso de datos, en busca de un lugar o estado más favorable. La migración es un fenómeno clave para diversos ámbitos de las sociedades y una fuerza muy poderosa para el desarrollo de las mismas.
El resultado es esta exposición virtual que ahora presentamos, para la que se han seleccionado 13 creaciones en formatos tan variados como fotografía, collages, pintura e ilustración digital. Además, de entre las obras seleccionadas, el jurado ha premiado tres obras que estarán expuestas físicamente en uno de los espacios del MUA.
En definitiva, la exposición virtual “Migraciones”, surgida de la II Convocatoria de Artes Visuales InteractUA, se revela como una excelente muestra del talento, el compromiso y la creatividad del alumnado de la Universidad de Alicante.
Las aves migratorias no son una metáfora de nuestro destino compartido, son nuestra historia futura que se juega frente a nosotros. Nos recuerdan apreciar la vida, bailar a su ritmo y celebrar la vida sin importar geografías y nacionalidades.
Para la presente convocatoria presentamos las Aves Migratorias dadas las diferentes prácticas migratorias que llevan a cabo. Éstas se mueven a través de diferentes contextos geográficos, como son el clima, las comunidades, bosques, ciudades, desiertos y mares entre otros.
Según una investigación de Oikos Journal de la Sociedad Ecológica Nórdica, más de 2 mil millones de aves migran de Europa a África dos veces al año en una de las representaciones de vida más fascinantes que conectan los dos continentes.
A medida que las aves migran, realizan diferentes actuaciones tanto ecológicas como artísticas.
Recogen comida en diferentes lugares y sobretodo hacen del cielo y de la tierra hogares temporales.
Sus viajes migratorios no se limitan a moverse del punto A al punto B, sino que realizan bailes arremolinados, convirtiendo el cielo en una pista de baile. Vuelan y aterrizan en constantes rituales nómadas que históricamente inspiraron a muchas comunidades humanas a moverse como nómadas.
Las aves siguen diferentes rutas nómadas, a veces desde el norte de Europa viajando hasta África central y viceversa. Cada año vuelan a destinos marcados por ciclos y patrones climáticos y ecológicos importantes para sus vidas.
Por lo general, migran por muchas razones, para alimentarse, anidar y formar un hogar, pero la búsqueda de lugares con temperaturas más cálidas y adecuadas para la reproducción es primordial. Escapan de los duros inviernos del norte y buscan más calor en el sur.
A medida que aumentan las temperaturas en el hemisferio norte, por ejemplo, las aves sienten un calor no sazonado, lo que les da la falsa impresión de la llegada del verano y un gran número de ellas decide no migrar. Esto crea una interrupción en sus ciclos de vida y salud. También afecta muchas otras prácticas ecológicas que las aves realizan en los diferentes ecosistemas que visitan y se encuentran, como lombrices, insectos, semillas y ciclos de vida de las plantas. El retraso en la migración de las aves también afecta aspectos de la vida de algunas comunidades humanas, como los nómadas del desierto.
Durante siglos, los espectáculos migratorios de las aves han formado parte del conocimiento tradicional de los nómadas del desierto. La llegada de aves migratorias indica cambios estacionales e informa sobre los niveles de calor. Cuando estas aves migratorias cruzan el desierto, lo hacen de noche, evitando la exposición al calor durante el día, siendo este conocimiento muy importante para sobrevivir en el entorno hostil.
En relación con los humanos, y en específico las personas nómadas, podemos observar un claro aprendizaje de las aves migratorias, las cuales nos aportan el saber sobre el cambio de estaciones en el desierto. El cambio climático ha afectado los ciclos de viaje de las aves migratorias y, en consecuencia, la vida de los nómadas en el desierto del Sahara. Hoy en día, se pueden ver menos aves migratorias año tras año, es inusual y no es natural.
En las fotografías 1, 2, 3, 4 y 5 podemos presenciar escenas de aves migratorias presenciadas en el desierto del Sahara y en las fotografías 6, 7, 8, 9 y 10 se aprecian las aves en el cielo español conectando los dos lados del Mediterráneo.
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